Paula Mocinho Novoa, 17 de mayo de 1970

Todos tenemos una fecha en la que deberíamos haber nacido y no nacimos. O la mayoría. Quizás algunos cumplieron con los pronósticos. Esta fecha en mi caso es el 17 de mayo de 1970. 

A veces me he preguntado quién sería si hubiera nacido ese día. Tiendo a pensar que mi dureza exterior se hubiera visto aumentada y también mi sentido del placer. Creo en los signos del zodíaco, y tauro es uno de los más hedonistas. Lo cual me parece una ventaja. Al final, en esta dimensión de la cosas nuestro cuerpo es nuestra mayor manifestación de lo que somos. Creo también en el cuerpo y todo lo que dice por nuestra alma, nuestro pasado y nuestro modo de relacionarnos tanto con el entorno como con nuestros congéneres y el mundo.

Sin embargo, los nacidos bajo el signo de géminis somos curiosos seres en todos los sentidos, y uno de nuestros rasgos más frecuentes es el orgullo con el que decimos: soy géminis, ¿y tú? Como si este hecho fuera fundamental en nuestra minúscula existencia. Además, acostumbramos a hermanarnos instantáneamente en el momento en que conocemos a alguien y nos enteramos que compartimos signo solar.

Curiosidades aparte, es una estupidez elucubrar con condicionales sobre algo que no sucedió. O quizás no, puesto que la mayoría de historias, o muchas, comienzan en la imaginación del que las pergeña bajo la premisa de y si... ¿Y si en lugar de haber nacido un 3 de junio hubiera nacido un 17 de mayo? Entonces me llamaría Paula Mocinho Novoa y sería galaicoportuguesa. Poeta como ahora soy, seguramente, pero con una clara determinación en mi mano: galopar a lomos de la conciencia para labrar las tierras del presente y recoger, tras la siembra de otras semillas, la nueva naturaleza humana.

¿Quién ha escrito esto ahora? ¿Paula o Laura? ¿3 o 17? ¿Tauro o Géminis? Qué más da, es de noche y estas líneas suscriben un momento pasajero del día de hoy en el que en un vagón de metro de las líneas nuevas de Barcelona, alguien piensa en el tiempo. En las fechas. En lo humano. En tonterías. ¿O no?

(*) Ilustración de Rafael Arjona