'Fuso negro' de Eva Hibernia, 'Soy lo que estás buscando' de Laura Freijo en el VACABARET y 'Llunàtiques' en lluna creixent

Este viernes se estrenaba en 'L'Estruch' de Sabadell una de las obras mayores de mi querida amiga y 'bessona geminiana' Eva Hibernia dirigida por ella misma e interpretada por Ana Casas en el difícil papel de Iseo, Emili Pere como el Inspector, Teresa Urroz como Alicia (madre de Iseo) y el joven Jaume Madaula como Silverado. Antes de entrar en materia, recordar que 'Fuso negro' ha sido Accésit del XIV Premio SGAE de Teatro de 2005. Pero vayamos a lo interesante, al montaje de este maravilloso texto que trata temas universales como la locura, el dolor y el amor por encima de todas las cosas como única vía de redención para aquellos 'seres frontera' que son capaces de traspasar lo oscuro, la sombra, lo animal, lo salvaje que posee el bosque en el que hace falta adentrarse para conocerse más a sí mismo y tender la mano a aquellos que pueden mirarnos a los ojos y calmar su ansiedad. Iseo es un personaje fascinante del que se enamora un Inspector compasivo desde el minuto cero. Pero Iseo debe emprender un viaje cuya espiral la pondrá al límite de su resistencia pero que gracias a ese amor redentor consigue saber finalmente quién es, qué quiere: vivir en paz. Gracias a una escenografía que se metamorfosea de una forma realista a otra más abstracta e interior a medida que el personaje principal también lo hace, el montaje se abre para que el espectador participe de una historia de lenguaje mesuradamente poético con toques de un humor impagable -esa escena entre el Inspector, Alicia, el termo de café y la pantera rosa es la más hilarante que yo le he visto al teatro de Eva Hibernia- que te atrapa desde el inicio. Un diseño de iluminación adecuado a cada instante, de gran capacidad atmosférica, junto con una dirección firme que sabe muy bien cómo servir el material que tiene entre manos hacen de este pequeño montaje un espectáculo estupendo que es una lástima se quede en esta primera propuesta del viernes en 'L'Estruch' de Sabadell ya que está pidiendo a gritos una continuidad. Y digo todo esto habiendo visto el ensayo general del jueves ya que no pude asistir al estreno por motivos que cuento a continuación.

Mientras 'Fuso negro' se aventuraba en el laberinto de su bosque asalvajado del Vallès, en 'La Cuina' de la Bonnemaison de Barcelona se celebraba abierta al público una miscelánea de los diez años de la Mostra Novembre VACA. En ella participamos unas cuantas vacas: Cecilia con su número de Cabaret, Mercè Pau con su versión reducida de 'Mòmies', Mercè Espelleta con 'Send in the clowns', Imma Manresa haciendo un numero de 'Transformació XSL', Margarita Ponce interpretando a su doctora Amor y cantando estupendamente 'Fly me to the moon', las increíbles 'Marys' y la intervención pensapoética de una servidora, todo ello trufado de videos y con las simpatiquísimas presentaciones de las compañeras Gemma Julià e Isabel Díaz. Y me voy a permitir el lujo de extenderme un poco en lo que fue para mí una experiencia maravillosa al reencontrarme con el público, con su complicidad, con su risa entregada y con su aplauso caluroso. Porque los espectáculos sólo tienen un juez: el/la espectador/a. Si bien la primera dramaturgia breve de pensapoamientos de 'Soy lo que estás buscando' era un tiro seguro ya que había funcionado a las mil maravillas en la inauguración del Círcol Maldà hace dos años -la cocina de un buen espectáculo suele ser una cosa lenta-, el viernes estrenaba un poema muy largo, de unas trece páginas, titulado 'Hay amores'; ya digo, todo ello parte de mi recital de pensapoesía 'Soy lo que estás buscando'. Puede decirse que este pensapoamiento larguísimo fue seguido por la platea con la precisión con la que yo marcaba los acentos en todos y cada uno de los gags que tiene. Mi desparpajo disfrazado de seriedad con el que iba jaleando y aplacando los aplausos constantes del público, me concedía una seguridad impagable a la hora de dar mis versos. Por decirlo de una manera gráfica: me sentía yo en estado puro. Una sensación difícil de explicar; obviamente una representación más de mi yo, todo el mundo tiene muchas de sí mismo. Afortunadamente, y como hacemos siempre, mi intervención en el VACABARET quedó registrada en la grabación de toda la celebración y prometo que pronto voy a tener un videoclip que colgaré en el blog para que disfrutéis -si es que lo hacéis habitualmente- tanto como yo. Por supuesto, antes de salir al escenario, con la sala a tope, el canguelo es total, pero una se pone el disfraz de estupenda y se lanza al ruedo con la convicción de que todos, público y servidora, vamos a triunfar porque nos lo vamos a pasar genial. Me encantó recibir felicitaciones de gente conocida, pero sobre todo de gente que no había visto en mi vida, que fue mucha.

Por último, destacar la capacidad de convocatoria que hemos adquirido las VACAS en este décimo aniversario de nuestra muestra, dato que ya se palpó en las 'Llunàtiques' de la semana pasada y que se ha confirmado en el VACABARET, donde se quedó gente fuera. Quedando así totalmente ratificado como una realidad en el pase de les 'Llunàtiques' de ayer tarde, iniciado con un 'círculo de mujeres' (y hombres, nos encanta que los hombres se sientan atraídos por este tipo de propuestas 'a priori' estigmatizadas como excluyentes) orquestado por Regina Carnicer que nos abrió el cuerpo y el espíritu a esa luna creciente que inspira deseos y proyectos. Después pasamos a la terraza, como la semana pasada, para saborear una 'performance' exquisita dirigida por Cristina Lügstenmann y Teresa Urroz. Y es que 'Llunàtiques, dones salvatges banyades amb llum de boja saviesa' se está convirtiendo en la perla de este Novembre Vaca y es de desear que este ciclo mixto de charla-conferencia y 'performance' no se quede aquí y se pueda ofrecer a otras localidades de Catalunya, aprovechando las diferentes lunas que tiene el mes.

(*) Foto de Rubén Ibarreta, 'Fuso negro'.