El cine siempre es un reducto de resistencia contra la mediocridad, contra el estadio grisáceo que a veces ofrece nuestro entorno. Y en ocasiones el torrente de creatividad que te encuentras es digno de las mejores montañas rusas de los mejores parques de atracciones del mundo. Eso es lo que pasa cuando te sientas en la butaca y asistes al festival visual que ofrece la última película de Álex de la Iglesia, 'Balada triste de trompeta'. Los hechos históricos de este país de países se van dando cita a medida que avanza una trama increíble -en todos los sentidos- que no sólo nos hace sonreír sino que también nos pone la piel de gallina. O por lo grotesco de sus personajes, o por la compasivo de lo que sugiere o por lo imposible de ese amor dividido entre dos payasos del cual al más siniestro en sus trastornados modos de resolver la vida. Su estripado argumento y su imaginativa puesta en escena convencieron al jurado del Festival de la Mostra de Venecia donde consiguió el premio al mejor guión y a la mejor dirección. Modestamente debo decir que a veces la película se va hacia un delirio que parece ponerlo todo patas arriba al borde del desastre aunque afortunadamente la segura batuta de Álex de la Iglesia recupera el pulso para que todo converja en ese cara a cara del payaso tonto contra el payaso listo. Confieso que salí del cine con mi imaginación trabajando a tres mil voltios por segundo. Y ahí estoy, confeccionando mi propio guión.
Mi segunda recomendación es 'Neds' de Peter Mullan, un actor habitual de algunas películas de Ken Loach que también dirige. 'Neds' es una película austera y muy dura que presenta unos años setenta muy distintos a los representados por Álex de la Iglesia. De ahí que si la fotografía de 'Balada triste de Trompeta' emula a ciertos cómics y colorea la imagen hasta el punto de sugerir una locura desfasada fuera de todo posible realismo, 'Neds' busca el mate y la verdad atroz de ciertos documentales que nos conducen a una contención que no elude la locura pero que la aborda desde la consecuencia lógica del entorno familiar, educacional y de unos barrios bajos que presentan dramas imposibles de eludir, que convierten a la víctima en verdugo al límite del suicidio contra el otro. Con un final que no explicaré pero que acomete una justicia poética conmovedora en todos los sentidos, un final de los más lindos de la temporada que se te queda grabado en la retina y que te acompaña durante unos cuantos días. 'Neds' ha conseguido la Concha de Oro del Festival de San Sebastián a la Mejor Película y la Concha de Plata al Mejor Actor, un tal Connor Mc Carron que aborda con una naturalidad escalofriante este adolescente inteligente, John Mc Gill, con capacidad para liderar las máximas notas de la clase y que al final acaba liderando una banda callejera. Un personaje dificilísimo ya que no sólo se define por el desarrollo de su violencia dentro de esta sociedad fracasada en la que se mueve sino por una mirada que explica en cada momento la complejidad de una transformación comparable a ese taxista de 'Taxi Driver' aunque se hallen a años luz de distancia. Creo que estamos ante una de las grandes películas de la temporada, así que, si podéis, no os la perdáis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario